Qué es la selección de personal y cómo ha cambiado en los últimos años
- Nadia Tártalo
- 14 jul
- 3 Min. de lectura
La selección de personal ha sido siempre un elemento clave en el crecimiento de cualquier empresa. Sin embargo, el modo en que se lleva a cabo ha cambiado profundamente en los últimos años. La transformación digital, el auge del trabajo híbrido y las nuevas expectativas de los profesionales han obligado a repensar cada etapa del proceso.
En este artículo, te explicamos qué es la selección de personal, cómo funciona el proceso tradicional y qué nuevas tendencias están marcando el futuro de la captación de talento.
Definición: qué entendemos por selección de personal
La selección de personal es el proceso mediante el cual una empresa identifica y contrata a los candidatos más adecuados para un puesto de trabajo. No se trata solo de cubrir una vacante, sino de encontrar a la persona que mejor se adapta a las necesidades del rol, del equipo y de la organización en su conjunto.
Este proceso implica filtrar, evaluar y comparar perfiles para tomar una decisión informada y estratégica. Puede llevarse a cabo internamente o externalizarse a través de empresas especializadas en selección de talento.
Etapas clave en un proceso de selección
Aunque cada organización puede adaptar el proceso a sus necesidades, en general, una selección del personal efectiva suele incluir las siguientes fases:
Definición del perfil: Qué necesita la empresa exactamente (hard y soft skills, experiencia, valores…).
Publicación y atracción de candidatos: En portales de empleo, redes profesionales o mediante headhunting.
Criba curricular: Evaluación inicial de los CVs recibidos.
Entrevistas: Telefónicas, presenciales o virtuales. A veces combinadas con pruebas o dinámicas.
Evaluación final y toma de decisión: Comparativa de finalistas y propuesta de contratación.
Onboarding: Incorporación y acompañamiento inicial del nuevo empleado.
Evolución de la selección: de CVs en papel a ATS
Hace apenas 15 años, muchos procesos seguían siendo manuales: recepción de CVs en papel, entrevistas presenciales y poco análisis estructurado. Hoy, la mayoría de empresas que quieren escalar confían en ATS (Applicant Tracking Systems) para gestionar de forma ágil y ordenada cada candidatura.
Además, el acceso global al talento y la competencia por perfiles cualificados han hecho que las empresas cuiden mucho más su propuesta de valor como empleadoras.
Nuevas tendencias en selección de talento
La selección de personal ya no se basa solo en experiencia previa o conocimientos técnicos. Hoy influyen muchos más factores que aseguran un buen encaje a largo plazo.
Digitalización del proceso
El uso de herramientas de videoentrevista, pruebas online y automatización en la criba permite a los equipos de RRHH ganar tiempo y reducir sesgos. También facilita una mejor trazabilidad y análisis de los datos del proceso.
Enfoque en soft skills y encaje cultural
Cada vez se valora más la adaptabilidad, comunicación, proactividad y colaboración. Estas competencias marcan la diferencia en entornos cambiantes y no siempre aparecen en el CV.
Por eso, muchos procesos incluyen dinámicas grupales, entrevistas por competencias o pruebas situacionales.
Employer branding y experiencia del candidato
La imagen que un candidato se lleva del proceso influye en su decisión, incluso si finalmente no es contratado. Por eso, el employer branding y la experiencia del candidato se han convertido en piezas clave. Un proceso claro, ágil y humano ayuda a atraer mejor talento y a mejorar la reputación de la marca.
Cómo lo hacemos en Artema: nuestra metodología
En Artema, creemos que la selección de personal no es solo un proceso operativo, sino una palanca estratégica para el crecimiento de nuestros clientes. Por eso, trabajamos con una metodología propia que combina:
Entrevistas profundas y personalizadas
Tecnología para agilizar y ordenar el proceso
Evaluación de competencias blandas y culturales
Seguimiento post-incorporación para asegurar el éxito del encaje
Además, en muchos casos, logramos reducir procesos que antes duraban meses a solo un par de semanas, sin comprometer la calidad.
